lunes, 9 de abril de 2012

Hice un click y me salió un ¡aha!.-

Me he convertido en una continua observadora de mi experiencia, por años disfruté el explorar la intelectualidad, sin darme cuenta que también podía explorar la espiritualidad. Recién en mis “tempranos fifty’s” me di cuenta que esas “otras experiencias” se estaban apoderando de mí. Comencé a percibir que no todos los eventos eran trágicos, que habían muchos otros que “se sincronizaban” y  no “necesitaba sentirme paralizada”, es decir: ¡no tenía que vivir atada de manos y pies!

Vuelvo a compartir que mi trasformación fue lenta pero segura! Al principio sentía que solo en algunas ocasiones tenía cierto acceso a situaciones que me permitían pensar libre y creativamente. Yo sabía que había alcanzado todas mis metas materiales, pero igual sentía que algo me faltaba, todo era demasiado superficial y yo quería hacer algo diferente! Empecé a participar en conferencias, estudios, workshops, lecturas, terapias, etc., y descubrí un nuevo mundo dentro y fuera de mí!  . . .

Ahora tengo respuestas y acceso a información que nunca imaginé.  Veo y compruebo talentos y habilidades que no tenía idea que poseía!  Me doy cuenta que nunca estuve sola, ni que era la rara o la loca---según las verdades de otros---. Ahora puedo ser rara y loca según mi propia verdad porque puedo, entre muchas cosas, reír y llorar al mismo tiempo o por separado y me siento de maravilla!.  Algo---que podría llamar libertad propia---se abrió en mi ser y se quedó abierto, algo que me permite mirar todos los mundos o los mundos de todos “siempre” de diferente manera.

Creo que podría resumirlo en pocas palabras: ¡¡Hice un click y me salió un ahá!!

w/muchness,