Voy a tratar de describir, lo mejor que puedo, lo que
sentí cuando la vi y nos abrazamos. Para empezar físicamente su pelo cortito
peinado al estilo punk contemporáneo le quedaba espectacular! Su cara
resplandecía en la noche entre todas las caras de los invitados, como si mil
luciérnagas se hubieran juntado para iluminar un aprendizaje más de mi vida.
Cuando la abrace sentí toda esa energía positiva y
cargada de millones de "quieros" . . . quiero estar acá, quiero estar
bien, quiero ser feliz, quiero a mi familia, quiero a mis amigos . . . quiero a mi vida tanto que aquí estoy
irradiando todo lo que tengo de bueno en mi, porque . . . quiero invitarte a vivir sonriendo!
Yo creo que todos escogemos "todo" siempre en
nuestras vidas. Cuando estamos allá
escogemos cuando y como nacer, así como cuando y como morir. Y, cuando estamos
acá, escogemos como percibir, como sentir, como reaccionar y como actuar. Nos
guste o no, tenemos que escoger qué hacer y qué no hacer ante los retos y
vivencias que se nos presentan en el día a día.
Yo no sé los qué, ni los por qué, de lo que Giesela
eligió y elige manifestar en su vida.
Solo puedo decir que, para mi, es un pilar de mujer cumpliendo su misión
con una entereza y una energía que podría llamar sagrada. Giesela, gracias por escoger conocer-me y
gracias por esa constante invitación a sonreír de forma tan iluminada!
w/muchness,
Mids