La Sexualidad y la Espiritualidad

Hablar sobre los chakras en estos días es algo bastante común, hace relativamente pocos años yo no tenía idea de qué eran ni como funcionaban, así como tampoco tenía idea de qué era la física cuántica y hoy es parte de mi mundo. Resulta que en el 2do chakra, entre otras energía que tienen que ver con las relaciones, se encuentra el centro de la energía de la sexualidad y de nuestra creatividad. Enterarme de esto me llevó a pensar que debo mantener mi sexualidad lo más equilibradamente posible para hacer un mejor uso de mi creatividad. Muchos hombres y mujeres podemos experimentar la sexualidad cargada de miedos, juicios y emociones. Es una pena pero parece que estas cargas no solo nos arruinan nuestra sexualidad, también nos hacen perder nuestra creatividad! Aunque parezca mentira hoy en día, que la sexualidad es tan abierta, muchos de nosotros todavía nos llenamos de miedo y tensión cuando queremos expresarnos sexualmente . . .
¿Qué pasaría si miráramos a nuestra sexualidad como una danza entre las energías masculinas y femeninas, y no tanto como un simple acto físico? Claro que es un acto físico, no hay duda de eso, pero imaginemos una creativa danza sexual donde involucramos además de nuestro nivel físico, el nivel emocional y el del corazón . . .

Normalmente cuando hablamos de sexualidad, nos esfocamos en el aspecto físico que es donde nuestro cuerpo conoce y busca sus deseos sexuales y obviamente es ahí donde los va a encontrar porque esa es "su misión". Pero, tambien sabemos que es nuestra conciencia la que va a determinar la forma en que estos deseos sexuales van a llevarse a cabo. Al referirme a “su misión”, estoy diciendo que el cuerpo por nacimiento solo conoce el deseo sexual donde están involucrados: el placer, el juego, la lujuria, etc. todas manifestaciones espontáneas del cuerpo!
Si el deseo sexual o la sexualidad es espontánea por “nacimiento” podríamos decir que "nuestro cuerpo no sabe elegir" el modo en que va a expresar su energía sexual! Ok, pero, entonces también podríamos decir que esa inocencia sexual con la que nacemos es relativamente corta porque nuestro Yo, en su etapa más madura es el que elige y dirige al cuerpo. Entonces ante esta premisa ya podríamos darle a escoger a nuestra sexualidad cómo quisiera experimentar sus deseos. Yo me apunto más por el modo amoroso donde el punto central sería el corazón, porque para mi, cuando dejamos que el corazón se haga cargo de la energía sexual, encontramos la expresión más gozosa. No descarto la sexualidad física y espontánea pero la encajo y la hago partícipe definitivamente con la danza de la energía del corazón.

Por otro lado no podemos dejar de darle importancia al aspecto emocional. Si ignoramos este, no estaríamos completamente "presentes" y esto nos separaría de lo que estamos experimentando. Por ejemplo si las energías del miedo, la cólera, tristeza, están presentes en una relación entre dos personas y estas energías negativas, no son atendidas, no les damos importancia ni las reconocemos adecuadamente; tengamos por seguro que de todas maneras aparecerán cuando estemos en la intimidad con una pareja. Cuando las emociones negativas aparecen causaran reacciones psicológicas de resistencia. En otras palabras nuestro cuerpo dejará de sentir deseo o excitación. Esto ya lo había descubierto Freud, cuando el cuerpo se resiste a la intimidad existe un mensaje muy claro: hay un bloqueo emocional y yo agregaría que hay un bloqueo en la energía del amor, ergo, una falta de amor por nuestra propia sexualidad. Sea cual fuera el problema con nuestra sexualidad hay que darle parte de nuestro tiempo espiritual; por sobre todo hay que atenderlo con ternura y amor para que la energía sexual pueda fluir libremente. De lo contrario estaríamos faltándo el respeto tanto a nosotros como a nuestra pareja.

Sabemos que existe una gran diferencia entre sentimientos y emociones a pesar de que los dos vienen del pensamiento. Los sentimientos están conectados con la intuición y con el conocimiento interior, podríamos decir que es nuestro lado sensible que "siempre nos habla" a través de susurros llenos de sabiduría y compasión. Mientras que las emociones son mucho más dramáticas, son más difíciles de manejar y por eso tratamos de esconderlas. En realidad podríamos llamarlas "explosiones" por no comprender lo que nos está sucediendo. Cuando la energía del corazón está totalmente presente en un encuentro sexual, permitimos que nuestra intuición tome el control de lo que está sucediendo entre nosotros en ese instante y no escondemos nuestras emociones, por el contrario hablamos libremente sobre ellas. Con esta libertad de expresión, nos aceptamos como somos y esa es la mayor sanación que pueda existir. Conectar la energía del corazón con la energía sexual tan creativa y poderosa puede llevar a una sanación en cualquier área de nuestro cuerpo.

Sin embargo por otro lado . . . el corazón también nos juega bromas, tiene como “un rol muy sutil”, está comprobado que puede privarnos de gozar de nuestra sexualidad. Hay personas que tienen un deseo muy grande en el corazón de elevarse sobre la realidad física de la tierra, o, a lo mejor tienen dogmas religiosos muy fuertes que le impiden al corazón abrirse a lo que la sexualidad realmente es! Pero eso lo compartiremos en otra oportunidad, mientras . . .
Suerte con tu sexualidad conectada a tu espiritualidad!
w/ muchness
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