Adiós a las Victimas y a los Villanos.-

Me quedé ¡plop! cuando---después de mi caída de caballo---me llegó un mail donde me enteré que antiguamente, en la otra parte del mundo---Oriente---se utilizaba al caballo para simbolizar “nuestras emociones”. Metafóricamente hablando, cuando nos relacionamos con los equinos---como con nuestros sentimientos---tenemos que enfocar nuestra atención totalmente “sensible y lúcida” a  las formas y fondos. Yo debo haber estado, en el momento de la caída, muy lejos de ese enfoque y de mi centro, por eso en ese momento también ¡plop!

Ya sabemos que convivir y/o entenderse uno mismo y con el otro, se “nos hace” complicado; dejando de lado si somos buenas personas, pacientes, racionales o inteligentes. Para los orientales siempre fue parte del “sentido de vida”, desarrollar técnicas a través de las cuales pudieran comprender sus comportamientos, conductas o manifestaciones emocionales. Para ellos era “impajaritable” lograr una amistad sana con uno mismo, con el otro y con todo lo que lo rodeaba, o sea con la vida misma. Podríamos decir que tenían un gran interés por el Universo Emocional del Ser “común y corriente”.

 Desgraciadamente, en esta parte del mundo,  desarrollamos técnicas solo dirigidas para los que “estaban enfermos de la mente”. Por eso siempre existió el miedo a todo lo emocional---¡EMOCIONAL = LOCO!---. Jamás pensamos utilizarlas ni practicarlas en “personas sanas, normales, comunes y corrientes".  Jamás se nos ocurrió que podrían ayudarnos a simplemente manejar nuestra relación interna de: yo conmigo y con el mundo,  manejar nuestras relaciones de amor, de miedo, dolor, rabia, crisis, envidia, valores, etc. Es cierto que con el tiempo también hemos experimentado que hay “técnicas” que hacen mucho daño, ergo, ATENTOS de no caer en "técnicas profesionales" que solo se dedican a trabajar equivocadamente el ego!

Para los que hemos leído algo de las Neurociencias, podemos ver que éstas confirman lo que practicaban y decían en el Taoísmo, Budismo, Zen, Sufismo y otros---sobre la importancia de “como"  vivir plenos, en armonía y sin contradicciones, manejando las circunstancias de la vida diaria adecuadamente para nuestra transformación y evolución. Felizmente hoy estamos “tratando de emparejarnos”---con esas enseñanzas---existe mucha información, muchas herramientas y tanta interacción, que todo depende únicamente de nuestra elección y decisión, ahora podemos decir con convicción: ¡adiós a las víctimas y a los villanos!

w/muchness,

ϻīԀš